La vibración es un proceso químico-mecánico en masa, en el que mejora la calidad superficial de las piezas tratadas de un modo eficiente y económico.
Según el objetivo que se desea conseguir, pulido, rebabado, decapado, desengrase, bruñido, decalaminado, protección antioxidante, superpulido con brillo espejo, etc., y según el material con el que se trabaje, se elegirá un proceso u otro. La clave del proceso reside en la perfecta combinación de abrasivo, producto químico y equipo de vibración seleccionado, para la elección de lo cual nuestro Equipo Técnico le podrá asesorar.
En el campo del acabado de superficies en masa, las líneas de vibradoras circulares con descarga automática, neumática y manual representan la respuesta más eficiente a las demandas del mercado.
Tanto el diseño, la estructura como la cuba monolítica, ha sido estudiado empleando medios de calculo y ensayo modernos, así como la estructura que está realizada con acero certificado, electro soldado y con un tratamiento térmico de normalización estructural.
La cuba monolítica de los vibros circulares está revestida con poliuretano colado de gran espesor, antiabrasivo, oleofóbico y con textura antiadherente. El canal plano de la cuba es la primera condición para un excelente acabado y un mejor rendimiento productivo.
La separación de los abrasivos y las piezas se realiza automáticamente usando rejillas adecuadas tanto de agujeros como de varillas en las maquinas con descarga automática, por mediación de extractores magnéticos o a través de salidas neumáticas, actuando sencilla y oportunamente sobre el moto vibrador.
El motor vibrador es el corazón de la maquina y éste está sobre dimensionado, bien ensayado y normalmente no precisa mantenimiento ni engrases periódicos.
El ajuste de las vibraciones permite lograr trabajos rápidos y perfectos gracias al sistema más versátil y universal actualmente existente, con posibilidad de intervención manual o automática.