Autores:
• Andrés Muñoz Machado, Secretario
• Javier Llompart, Vicepresidente
Comité de Industrialización del Instituto de la Ingeniería de España.

Contexto Histórico y Actual

Desde la Primera Revolución Industrial, la industria ha sido una columna vertebral de la economía mundial. En España, la evolución de la industria ha sido crucial para el desarrollo económico y social. Sin embargo, en las últimas décadas, la participación del sector industrial en el PIB español ha disminuido significativamente. Según datos recientes, el sector manufacturero, que constituye el núcleo del sector industria, representa aproximadamente el 13% del PIB, muy por debajo del objetivo del 20% propuesto por la Unión Europea para revitalizar la economía y garantizar un crecimiento sostenible.

El Trabajo del Instituto de la Ingeniería de España

El Instituto de la Ingeniería de España viene desempeñando un papel fundamental en la elaboración y negociación de un Pacto de Estado por la Industria, trabajando en estrecha colaboración con partidos políticos, organizaciones empresariales y sindicatos. Este esfuerzo ha culminado en la “Propuesta sectorial para una estrategia industrial”, que establece líneas estratégicas de acción, objetivos y acciones específicas para revitalizar la industria española. Esta propuesta se alinea con la Estrategia Industrial Europea y con el Proyecto de Nueva Ley de Industria.

Importancia de la Innovación Tecnológica

La innovación tecnológica es un motor crucial para el progreso industrial. En la era de la Revolución 4.0, la digitalización y las nuevas tecnologías como la inteligencia artificial, la robótica avanzada, la fabricación aditiva y la Internet de las Cosas (IoT) están redefiniendo la forma en que se produce y se gestiona la industria. La adopción de estas tecnologías no solo mejora la eficiencia y la productividad, sino que también crea nuevas oportunidades de negocio y empleo.

Revolución 4.0: Transformación Digital

La digitalización o Revolución 4.0 supone la implantación generalizada de avances tecnológicos de manera transversal. Estas tecnologías están induciendo cambios profundos en los dispositivos para producir, en la organización de la producción, en los servicios a empresas y en los modelos de negocio. Entre las tecnologías clave se encuentran:
• Internet de las Cosas (IoT): Permite la interconexión de dispositivos y sistemas, mejorando la eficiencia y la gestión de recursos.
• Computación en la Nube (Cloud): Facilita el acceso y almacenamiento de grandes volúmenes de datos, impulsando la innovación y la flexibilidad operativa.
• Robótica Avanzada: Aumenta la precisión y la velocidad en procesos de fabricación, reduciendo costos y mejorando la calidad.
• Fabricación Aditiva (Impresión 3D): Revoluciona la producción al permitir la creación de piezas complejas con menos desperdicio de material.
• Big Data y Analítica: Proporciona insights valiosos para la toma de decisiones estratégicas y operativas.

La Industria y el Empleo de Calidad

La industria es un importante motor de la economía, que induce la creación de empleos de calidad. Los puestos de trabajo en el sector industrial tienden a ser más estables y mejor remunerados que en otros sectores, debido a la alta cualificación requerida y a la capacidad de generar empleo indirecto. Según diversos estudios, cada empleo en la industria puede generar entre 0,5 y 4 empleos indirectos e inducidos.

Formación y Educación

La industria requiere una mano de obra altamente cualificada, lo que impulsa el nivel educativo de la población. La formación profesional y la educación superior se vuelven cruciales, fomentando una cultura de aprendizaje continuo y adaptabilidad. La formación dual, que combina educación en centros institucionales con prácticas en empresas, es una de las mejores prácticas para preparar a los trabajadores del futuro.

Innovación y Competitividad

La innovación es el corazón del progreso industrial. La Comisión Europea recomienda que los países gasten al menos el 3% del PIB en Investigación y Desarrollo (I+D). Los países que más invierten en I+D, como Corea del Sur, Japón, Estados Unidos y Alemania, también son los más prósperos. La industria española debe incrementar su inversión en I+D para ser competitiva a nivel global y para liderar en innovación.

Estrategia Industrial 2030

El Foro de Alto Nivel de la Industria Española, en colaboración con el Instituto de la Ingeniería de España, ha elaborado una estrategia industrial con el horizonte en 2030. Esta estrategia tiene tres objetivos principales:
1. Reindustrialización de la Economía: Aumentar la participación del sector industrial en el PIB y en el empleo.
2. Transformación Digital del Tejido Industrial: Adaptar las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) al nuevo contexto tecnológico y competitivo.
3. Transición Ecológica y Economía Circular: Aprovechar las oportunidades de la economía circular y mitigar los impactos ambientales de la industria.

Transición Ecológica y Economía Circular

La sostenibilidad se ha convertido en un imperativo para la industria moderna. La transición hacia una economía circular, donde los recursos se reutilizan y reciclan en lugar de desecharse, es crucial para reducir el impacto ambiental y mejorar la eficiencia de los recursos. Las acciones clave incluyen:
• Eco-Diseño: Crear productos con un ciclo de vida extendido, que sean fáciles de reparar, reutilizar y reciclar.
• Gestión de Residuos: Implementar prácticas para reducir, reutilizar y reciclar los residuos industriales.
• Eficiencia Energética: Adoptar tecnologías y procesos que reduzcan el consumo de energía y las emisiones de carbono.
• Energías Renovables: Integrar fuentes de energía renovable en los procesos de producción para minimizar la dependencia de los combustibles fósiles.

Acciones Clave para la Reindustrialización

Para lograr estos objetivos, se han identificado un conjunto de acciones estratégicas:
• Fomento de la Innovación: Incrementar la inversión en I+D y promover la colaboración entre universidades, centros de investigación y empresas.
• Mejora de la Competitividad: Simplificar la burocracia y mejorar el acceso a la financiación para las PYMEs.
• Formación y Capacitación: Potenciar la formación profesional y adaptar los planes de estudio a las necesidades de la industria.
• Apoyo a la Transición Digital y Ecológica: Implementar tecnologías digitales y fomentar prácticas sostenibles en la producción industrial.

Coordinación y Gobernanza

Es esencial una coordinación efectiva entre las distintas administraciones y una alineación con las políticas de la Unión Europea. El Instituto de Ingenieros de España propuso y apoyó la creación de una Secretaría de Estado de Industria con suficientes atribuciones y recursos para desarrollar y ejecutar esta estrategia. Además, es crucial el apoyo a la internacionalización de la industria española, insertándola en las cadenas globales de valor.

Conclusiones

La revitalización de la industria española es una necesidad urgente para garantizar el crecimiento económico y la estabilidad social. La adopción de tecnologías avanzadas, la innovación y la transición hacia una economía circular son claves para este proceso. La colaboración entre el gobierno, las empresas y las instituciones educativas es fundamental para crear un entorno propicio para el desarrollo industrial. La estrategia industrial 2030, elaborada por el Foro de Alto Nivel de la Industria Española, ofrece una hoja de ruta clara y ambiciosa para alcanzar estos objetivos. La implementación efectiva de esta estrategia será crucial para asegurar un futuro próspero y sostenible para España.