Por primera vez, los fabricantes de automóviles y baterías pueden reciclar a escala industrial las baterías usadas o defectuosas de los coches eléctricos gracias a la tecnología láser de TRUMPF. Esta empresa de alta tecnología desarrolla sistemas láser que cortan las baterías usadas de forma segura y extraen las valiosas materias primas de la lámina de la batería.
La empresa ha presentado los nuevos procesos láser por primera vez en la feria líder de tecnología de baterías, Battery Show Europe 2024, en Stuttgart.
Un gran mercado para el reciclaje de baterías de coches eléctricos
Sin materias primas valiosas como el cobalto, el litio o el níquel, actualmente no existen baterías para coches eléctricos. Sin embargo, la extracción de estas materias primas es costosa y no siempre sostenible.
Los fabricantes también deben aceptar cadenas de suministro largas e inciertas. Además, la UE exige una tasa de reciclaje de hasta el 90% para las baterías. “Por lo tanto, la industria tiene que reciclar a gran escala.
Los láseres aseguran altas tasas de reciclaje
Los electrodos de las nuevas pilas se crean como tiras de lámina recubiertas de materiales valiosos como el cobalto y el níquel. En una futura planta de reciclado, los procesos láser pueden eliminar la fina capa de la lámina. Los fabricantes pueden recoger el valioso polvo y procesarlo para nuevos revestimientos. Hasta ahora, no era raro que kilómetros de láminas recubiertas acabaran como desechos en la basura.
En el futuro, la tecnología láser también podría usarse para reciclar paquetes de baterías. La tecnología láser es la única forma de asegurar un desmantelamiento eficiente y automatizado, por ejemplo, para quitar las cubiertas de las baterías o cortar cables.
Luego, las materias primas pueden ser clasificadas y las celdas de batería que aún son utilizables pueden ser separadas y reutilizadas directamente. Hasta ahora, el desmantelamiento de baterías de coches eléctricos ha sido un proceso manual.